Comienza la campaña #BrechasenlasTICFM por el Día Mundial de Internet.
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24 mayo, 2023El pasado 17 de mayo se celebraba el Día Mundial de Internet y con ello desde Fundación Mujeres y el Observatorio de Igualdad y Empleo, se ponía en marcha la campaña #BrechasenlasTICFM. Esta campaña cuenta con una duración de 3 días en los cuales se busca visibilizar las brechas de género que se encuentran en la formación, acceso y desempeño laboral en el sector TIC, centrando la atención en la brecha de género en los roles laborales desempeñados una vez logrado el acceso a trabajos del sector.
En este contexto, Sofía Serrano, Digital Product Manager, nos concede una entrevista que sirve como muestra a todas aquellas cuestiones teóricas que se mencionan a lo largo de la campaña sobre desigualdades entre hombres y mujeres en el sector TIC. Sofía Serrano, estudió un módulo superior de sistemas informáticos y se graduó en ingeniería informática. Además, ha realizado diversos cursos de gestión de productos digitales. A día de hoy cuenta con 8 años de experiencia en el sector y durante más de cuatro años se ha estado dedicando a la gestión de equipos informáticos y productos.
¿Qué te llevó a interesarte por las TIC?
Cuando terminé los estudios de bachillerato no tenía nada claro en qué quería invertir mi tiempo y mi esfuerzo. No sabía “que quería ser de mayor”, tampoco me ayudaron mucho entonces a orientarme en el instituto y no me llamaba la atención ninguna carrera universitaria. Así que me fijé en el listado de formaciones profesionales disponibles y aposté por el módulo superior de Administración de Sistemas Informáticos, gracias a la sugerencia de mi madre “a ti se te da bien eso de los ordenadores”, me dijo. Desde que teníamos ordenador en casa yo me encargaba de instalar y reparar lo que hiciera falta con conocimientos muy básicos y mi madre vio un talento oculto en mí. Resultó un acierto y me encontré con el primer referente profesional de mi vida: una profesora de informática con la que aprendí a programar desde cero y me animó a seguir estudiando el grado de ingeniería informática. Desde hacía mucho tiempo no me había interesado tanto por unos estudios y obtuve un 9,25 de nota media.
Tanto en el sector educativo como laboral, ¿Te encontraste con mucha presencia de mujeres?
En el módulo éramos 2 mujeres de 10 estudiantes, y en la carrera nos graduamos otras 2 de unos 25. Había muchas más compañeras que estudiaban la doble carrera: ADE + informática. A nivel de profesorado, los referentes femeninos que encontraba pertenecían a las asignaturas más ligadas a las matemáticas. La sensación que me daban en general todos los profesores universitarios era de agobio porque aparte de trabajar dando clases tenían que realizar investigaciones y tesis, por lo que no se convirtieron en referentes en mi vida. Faltan mujeres referentes y las que ha habido a lo largo de la historia han sido invisibilizadas. La primera persona que desarrolló un lenguaje de programación fue una mujer: Ada Lovelace y otra mujer: Hedy Lamarr fue la inventora del wifi en 1941.
¿Cuáles son los obstáculos que has encontrado en el acceso al mundo laboral TIC?
De primeras diría que ninguno, hay una alta demanda de programadores informáticos y he tenido ofertas de empleo desde antes de terminar la carrera. Los obstáculos han venido en la equidad salarial y en la valoración dentro del puesto de trabajo. Las estadísticas dicen que somos más mujeres licenciadas en casi todas las carreras, sin embargo, llegamos a menos puestos de poder. Si pregunto a amigos y compañeros, hay mujeres al mando en sus trabajos, pero en puestos intermedios y las que menos como directoras. Las que lo son además han tenido que optar por un carácter más autoritario y menos empático.
¿Has sufrido alguna situación desagradable (estigma, prejuicios…) por la mayor presencia de hombres en tu entorno laboral?
Por desgracia la respuesta es sí. Hay un concepto muy importante que es la amenaza del estereotipo, por el hecho de ser mujer pueden juzgar de inicio que tu trabajo no va a salir del todo bien, y he tenido que justificar una y otra vez que merezco el puesto de trabajo frente a otros compañeros. El punto de partida desde el que yo he empezado está mucho más atrás. Y, lamentablemente, sobre todo al inicio de mi carrera, se ha generado debate en la oficina sobre mi vestimenta, mi físico y he tenido que oír comentarios inapropiados de puestos de mando.
¿Crees que tuviste las mismas condiciones de acceso que tus compañeros hombres?
Reflexionando ahora creo que se me juzgaban de otra manera en las entrevistas y se veía reflejado en el puesto y salarios. Mismo puesto, mismas funciones, más experiencia laboral por mi parte y he ganado menos que otros programadores. Ahora he aprendido a negociar y aportarme valor en las entrevistas.
¿Han rechazado muchas de tus propuestas?
Me ha ocurrido en bastantes ocasiones, que si yo realizaba alguna propuesta hasta que no la confirmara un programador de género masculino no se daba por buena. Esto al final generaba incrementar poco a poco mi síndrome de la impostora, ¿seré buena en verdad?, ¿lo estoy haciendo bien?, ¿aporto valor? Actualmente estoy muy orgullosa del camino que he recorrido.
“Partimos de un pistoletazo de salida muy diferente en el mundo de la informática, pero cada vez somos más demostrando que aportamos valor en las TIC desde hace mucho tiempo”
No se trata de ser las mejores, hay personas que destacarán siempre frente a otras, se trata de conseguir una igualdad de oportunidades laborales basado en el respeto mutuo.
El Observatorio de Igualdad y Empleo es una acción de divulgación que forma parte del proyecto DANA+, financiado por el Fondo Social Europeo-Programa Operativo de Inclusión Social y Economía que se desarrolla entre 2019 y 2023.
Publicación realizada para la campaña #BrechasenlasTICFM con motivo del 17 de mayo, Día Mundial de Internet dentro del marco del proyecto Empoderamiento e Igualdad para el empleo, financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.