Campaña #PorLosDerechosLaborales Desigualdades en el acceso al empleo

El 1 de mayo se celebraba el Día Internacional de las Personas Trabajadoras. Por motivo y en el marco de la campaña #PorLosDerechosLaborales, resulta interesante centrar l atención en aquellas cuestiones pendientes en materia de igualdad y empleo. Así, la igualdad entre mujeres y hombres se convierte en uno de los asuntos pendientes, tanto desde lo relacionado con el acceso al empleo como en lo relacionado con el desarrollo profesional.

Brecha de género en el empleo.

La “Brecha de empleo” es un nuevo indicador creado por la Organización Internacional de Trabajo (OIT), debido a que la tasa de desempleo no proyecta una imagen completa de la desigualdad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral. Este indicador mide la cantidad de personas que están buscando un trabajo pero que siguen desempleadas. Principalmente este indicador busca tener en consideración aquellas situaciones que impiden que las mujeres accedan a un determinado trabajo.

En este sentido, el ejemplo más claro, según la OIT, es el de cuando te llaman de una oferta, es probable que tengas que incorporarte a la mayor brevedad posible. Ciertas veces, las mujeres no pueden responder con esta rapidez, debido a los cuidados familiares que realizan. Es decir, pueden no tener los mecanismos para compatibilizar el trabajo con el cuidado de los hijos u otros familiares, responsabilidad que recae mayoritariamente en ellas. Por lo tanto, tienen menos disponibilidad. Según el Instituto Nacional de Estadística, la brecha de empleo en España en el 2022 se situó en un 10,8%.

La importancia del contexto

Las desigualdades en el acceso al empleo no empiezan solo en el momento en el que se está buscando trabajo. Hay muchos más factores que se producen desde edades tempranas que dan pie a dicha desigualdad, como pueden ser la pobreza o situaciones familiares determinadas que hacen que las niñas tengan menos oportunidades de conseguir una educación de calidad, que más tarde se traduce en una menor cualificación, y por ello, mayores dificultades para encontrar un trabajo estable.

Estereotipos femeninos

Las mujeres están acompañadas de una serie de estereotipos que las afectan de cara a acceder a un empleo. Debido a tópicos como que las mujeres son menos analíticas y más sentimentales, no se valora igual el trabajo de una mujer que el de un hombre. Además, hay una tendencia a infravalorar la formación y las habilidades que puede tener una mujer. La maternidad también es un tema que dificulta la contratación de las mujeres, también para aquellas que están en edad de serlo, así como el tener hijos pequeños hace que tengan menos probabilidades de entrar y prosperar en el mercado laboral.

El empleo feminizado

Además de las desigualdades que existen en la búsqueda de trabajo, estas también se encuentran en el momento que acceden a él. En España, las mujeres tienen una mayor representación en sectores como el comercio y la hostelería, sectores que producen situaciones de precariedad a la mujer debido a la alta temporalidad y parcialidad de estos trabajos. Es por ello que el empleo “femenino” se traduce en mujeres vulnerables.

Puedes acceder a la fuente original a través del IV Informe de la OIT; Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales; Informes del OIT; Noticias de la ONU.

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